Balón de juego disputado (foil) (LCI)

Pelota de juego disputado
Costo de lanzamiento: {2}
Tipo de tarjeta: artefacto
Texto de la tarjeta:

• Siempre que infliges daño de combate, el jugador atacante obtiene el control de la bola del juego en disputa y la endereza.
• {2}, T: roba una carta y pon un contador de puntos en la bola del juego disputado. Luego, si tiene cinco o más contadores de puntos, sacrifícalo y crea una ficha de Tesoro.

Características de la tarjeta:

• Costo de lanzamiento: Requiere dos manás incoloros para lanzarlo.
• Tipo de tarjeta: Artefacto.

Habilidades e interacción de las cartas:

• Intercambio de daño de combate: la pelota de juego disputada tiene una habilidad única en la que el jugador atacante obtiene el control de ella cada vez que infliges daño de combate. Esto introduce un elemento interactivo y temático al juego.
• Robo de cartas y contadores: al pagar {2} y tocar la bola del juego disputado, puedes robar una carta y colocarle un contador de puntos. El eventual sacrificio de la carta, provocado al alcanzar cinco o más contadores de puntos, te recompensa con una ficha de Tesoro.

Utilidad de cubierta:

• Jugabilidad política: fomenta las decisiones estratégicas durante el combate, ya que infligir daño a los oponentes podría hacer que obtengan el control de la bola del juego en disputa.
• Ventaja de la tarjeta: proporciona robo de cartas con el potencial de acumular beneficios adicionales mediante la creación de fichas de tesoro.

Sabor y tradición: el concepto de "balón de juego disputado" implica un elemento lúdico y competitivo en el juego. La obra de arte de Camille Alquier probablemente captura la esencia de un juego o deporte, añadiendo un toque caprichoso a la tarjeta.

Impresión general: El juego disputado aporta un elemento interactivo e impredecible al campo de batalla, fomentando decisiones estratégicas durante el combate. La combinación del robo de cartas y el potencial para crear fichas de Tesoro lo convierte en una adición interesante a los mazos que disfrutan del juego político y la ventaja de las cartas de valor.